ADN ARGENTINO: RAMIRO GONZALEZ

En un principio la idea de hacer un disco con canciones pensadas desde las peñas, que vinieran desde esa interacción con un público que siente la música desde lo corporal y lo manifiesta bailando, era también hurgar un poco mis orígenes para hacer hincapié y cimentarme en ellos. Porque si hay un lugar de donde proviene mi música es sin lugar dudas el ámbito de las peñas. Habiendo pasado por todos sus recovecos, además de sus escenarios, desde armar empanadas a preparar locro, ser público y aprender a bailar en sus pistas improvisadas, y por supuesto haberlas organizado, armando mesas, sillas, tablones, y luego tener que limpiar los espacios donde se desarrollaban.

Hurgando en mis adentros es también que pude descubrir que en mi casa materna hubo muy poco o nada de música grabada sonando, durante mucho tiempo no hubo siquiera un equipo donde escuchar música, ni radio había. Lo que más me acercó a ese universo maravilloso fue mi hermano Mario tocando la guitarra y cantando. O algunos fines de semana cuando nos tocaba pasar con mi viejo estar de asado y guitarreada con sus amigos, o en las peñas.

A pesar de esa ausencia cotidiana, mi relación con la música fue tan fuerte que terminó siendo preponderante en mi vida. Por eso me pregunté siempre, cómo hubiera sido la historia si hubiese tenido una educación musical desde lo cotidiano, de una madre que ponga música en la mañana y cosas por el estilo. Fue así que pensé en “Peñero” no solo como un disco para bailar y tocar en las peñas, sino como un disco que pudiera estar al alcance de todos, y existiendo ahora la posibilidad de la libre descarga lo pensé desde ahí, aunque por un momento me desvié pensando en una edición física (que viene un poco demorada pero en breve vamos a estar realizando).

Un querido amigo, el poeta coscoíno Luis Alex, suele decirme siempre: “la palabra es para darse cumpita”. Yo pienso que si la palabra es parte de la canción, entonces la canción también es para darse. Así es que primero empecé a grabar algunas cosas en mi casa pensando en mis limitaciones económicas, por el alto costo que implica una producción profesional, y cuando vi que no arrancaba más, tomé conciencia, un poco de coraje, y encaré las cosas seriamente endeudándome hasta el cuello, pero a la vez saldando una gran deuda con mis orígenes.

Así fue que en octubre del año pasado entramos a grabar desde cero con mis compañeros del trío, Emanuel Albera en Guitarras, Diego Sánchez en Batería y diseño gráfico, a quienes se sumaron Sayi París en las Ilustraciones, Guido Gironelli en logística, y un puñado de invitados en una producción sería con el fin de poder editar además en formato de CD, todo eso gracias a los estudios de grabación que nos hicieron el aguante, Estudio Guaco en La Rioja Capital donde se grabó la mayor parte, se mezcló y masterizó gracias a la generosidad de Luis Chazarreta que además nos prestó donde hospedarnos. Y Estudio Liverpool en Córdoba Capital donde se grabaron dos canciones completas, mas charangos y algunas voces.

Y aquí estamos colgando el último banderín, casi como de taxi libre, pero de libre descarga.

Que lo disfruten!